Guiados por un simpático voluntario de origen latino, miembro de la Sociedad para la Investigación y Documentación de Estructuras Subterráneas de Berlín, recorrimos un espacio único y sensitivo.
La citada asociación mantiene e investiga sobre las construcciones subterráneas de Berlín, principalmente derivadas de la Segunda Guerra Mundial, aunque no exclusivamente. El experto estuvo prolijo en explicaciones. Al fin y al cabo, éramos cuatro quienes le acompañábamos, algo muy diferente de los treinta o más que suele manejar en sus excursiones habituales. Tan escaso número nos permitió un viaje a placer, cercano y amigable.
Así, nos mostró un nuevo engaño del gobierno nacional socialista a su propio pueblo, haciéndoles creer que se alojaban en búnqueres donde estarían a salvo de los bombardeos, siendo ésto imposible dadas las dificultades de la ciudad de Berlín para construir, debido a sus capas geológicas, bajo su superficie. Quedaban claras las artimañas psicológicas para que la población se sintiera segura, así como la astucia que había que desarrollar para mantener vivas y con cierta esperanza a miles de personas que se refugiaban en los subterráneos huyendo de las bombas.
Entre muchísimos objetos de la guerra, perfectamente conservados, pudimos contemplar los retretes de serrín, los ficheros de los soldados esclavos rusos, los materiales "didácticos" para los niños, las salas donde aguantaban entre bancos a la medida establecida los ataques de los aliados y los rusos, sus literas, sus enfermerías, sus sistemas de aireación aprovechando el paso de los trenes del metro, restos de armas y uniformes, etc.
En definitiva, un viaje asombroso por un mundo oculto bajo nuestros pies y en el que los seres humanos desarrollaron un modo de sobrevivir al desastre que supone perder una gran guerra.
Si se va a Berlín, es una visita obligada.
pero no estan permitido sacar fotos!
ResponderEliminarLas fotos se sacaron con expreso permiso.
ResponderEliminarproximamente viajo a Berlin desde la Argentina, sin duda será una de las visitas.
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